Tu abuela Elvira vino a conocerte

Gracia,

Como ya te hemos contado, tu abuela Elvira vino a acompañarnos durante tu primer tiempo. Su fecha de llegada era justo tu fecha tentativa de nacimiento, pero como tú te demoraste un poquito, estuvo casi una semana antes de que nacieras y se fue un poco antes de que cumplieras un mes.

Durante su primera semana aprovechamos de pasear por la ciudad y luego empezamos a pasear contigo, aunque tú no te diste mucha cuenta de nada.... pero tenemos fotos para mostrarte!

Al igual que nosotros, ella estaba fascinada contigo y te regaloneó a morir. Durante el día jugaba más con tu hermana Clara, que estaba un poquito celosa contigo, pero cuando ella se iba a dormir aprovechaba de tomarte en brazos, cantarte y conversarte. Una de las cosas que más le gustó era verlas a ti y a tu hermana Clara con los piyamas de oso! Un oso rosado y uno celeste...

Fue tan rico tenerla de visita!!! Porque además de cuidarte a ti nos cuidó a todos, así que ahora la echamos de menos, pero seguimos hablando por teléfono y por skype (con camarita) para que vea cómo vas creciendo y cambiando

Cuarta Semana

Gracia,

Tienes cuatro semanas!!! Te llevé al segundo control y habías crecido 1 cm desde la última vez que te vieron, pero - para mi sorpresa - ¡habías bajado de peso! Yo me estresé a morir, aunque la enfermera lo único que hizo fue decirme que no me preocupara... en fin. Nos fuimos a la casa con indicaciones de que me sacara leche y te la diera con mamadera después de que terminaras de tomar por ti misma y que volviéramos la semana siguiente para pesarte otra vez.

Como era de esperar, la mamadera te cargó y no hubo caso. Tu papá fue a comprar una especie de jeringa especial para alimentar guaguas que funcionó un poco mejor, pero parece que te di demasiada leche, porque empezaste a vomitar! Casi te salía por las orejas, pobrecita!

Dado el desastre - y con el estrés en su máxima expresión - dejamos de lado mamaderas y jeringa y empecé a darte papa más seguido... básicamente apenas abrías un ojo. Y funcionó, porque cuando te llevé de nuevo a que te pesaran ¡habías subido 100gr! O sea, volviste a ser una gordis.

Con eso nos relajamos todos otra vez. Ahora te doy papa cuando te da la gana y te ves de lo más rosadita y feliz.

Cambiando el tema, estos días han estado bastante helados, así que no hemos podido pasear tanto. Hemos ido a la biblioteca de South Yarra, que tiene juegos para tu hermana Clara y sillones para instalarnos y darte papa. También hemos ido un par de veces al parque a ver "birds", pero cortito, porque el invierno es poco amigable para ti, aunque te quedas tranquila en tu coche, forrada de frazaditas y mirando para afuera... Te portas tan bien! Eres una guagua adorable.